9 oct 2010

09 de octubre de 2010

Van Morrison durante unas semanas se enamoró perdidamente de una bailarina (como debía bailar...). Fue tal la intesidad de su romance que en el año 68 publicó Astral Weeks. Me imagino la fuerza de la historia con el título del álbum, y solo me sale un profundo y sincero suspiro.

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